El 43,09% de los electores europeos acudió a las urnas, sólo 0,12 puntos más que en las elecciones de 2009. La mayor movilización del voto en Francia y Alemania (los dos países más poblados de la UE), donde la participación aumentó en casi cinco y tres puntos respectivamente, ha logrado compensar la bajísima participación cosechada en los países del este.
Por mucho que se camuflen los resultados estadísticos oficiales, no se me negará la validez de este resúmen: el 87,72 % de los electores europeos no ha votado al partido que dirigirá la política europea en los próximos cinco años y en España no lo ha hecho el 88,5 %, que son los que no han votado al PP.
Por mucho que se camuflen los resultados estadísticos oficiales, no se me negará la validez de este resúmen: el 87,72 % de los electores europeos no ha votado al partido que dirigirá la política europea en los próximos cinco años y en España no lo ha hecho el 88,5 %, que son los que no han votado al PP.