“Busca la
simplicidad y desconfía de ella”. Ken Knabb
La discusión acerca de la teoría y la práctica es
recurrente cuando discuto con gente amiga que milita en partidos de la
izquierda. Lo más frecuente es que alguien acabe diciendo algo parecido a ésto:
“hay mucho pico de oro, lo que hay que hacer es actuar, menos teoría y más
caña”. Otra discusión tan recurrente como ésta es la que trata sobre si la revolución es posible o no.
La verdad es que cuando la conversación avanza,
cuando hay oportunidad de profundizar en las ideas y sentimientos más hondos, pareciera que coincidimos; cualquier observador neutral podría afirmar que “en el fondo,
compartimos un pensamiento revolucionario común”. Uno de esos
amigos ha llegado a decirme algo así como que “en el fondo, todos deseamos
una sociedad plenamente democrática, sin capitalismo y sin estado…lo que pasa
es que eso, la revolución, es hoy tan imposible que resulta una idea absurda”.