Por
esos vericuetos que nos reserva la vida, llega a mis manos un libro de Steven Pressfield, reconocido escritor de
novelas históricas, que ha hecho un paréntesis en su obra para reflexionar en
este libro acerca de las resistencias que nos extravían de nuestro propio
camino, de las muchas distracciones y fuerzas que se oponen a que cada persona haga
lo que quiere hacer y logre ser quien quiere ser. Y me está siendo muy útil en
estos momentos en que yo mismo ando ocupado en parecidos pensamientos, frente a
mi principal resistencia, que hoy es la pereza. El libro tiene por título “La
guerra del arte” y me parece recomendable leerlo porque, al menos, es seguro
que provocará algunas reflexiones importantes, de esas que nos acercan a un
mejor conocimiento de nosotros mismos.
Cuando
leí: “escribir no es la parte difícil, lo
difícil es sentarse a escribir, lo que nos detiene es la Resistencia” , empezó
a interesarme, me dije “ésto va por mí”; cuando más adelante leí “la mayoría de
nosotros tenemos dos vidas, la vida que vivimos y la vida no vivida dentro de
nosotros, entre las dos se encuentra la Resistencia”, entonces me interesó aún
más, al ver que además de a mí, el libro iba dirigido al resto del mundo.
Reconozco una gran sinceridad y honestidad en los pensamientos que transmite, que
me provocan y que valoro por encima de mis profundas discrepancias, asentadas
tras concluir la lectura del libro. Y, sobre todo, agradezco a su autor que su
esfuerzo me esté siendo útil para construir mi propia teoría sobre la
Resistencia.