EN MEMORIA DE JORGE BALDESSARI

Jorge Baldessari

Conocí a Jorge hace unos cuantos años, con ocasión de una actividad denominada “A todo tren”, organizada por el centro de creación contemporánea Espacio Tangente, de Burgos. Allí coincidimos, él en representación de la asociación Imágenes y Palabras, yo en representación del grupo País Románico. Meses después estuve con Fini y con Andrea Milde en el pueblo de Burgos donde él y su compañera Dorien se habían establecido y enraizado, poniendo en marcha un proyecto muy innovador, un centro de producción artística en el medio rural, con estancias para jóvenes artistas de toda Europa que, durante varios años, ayudaron a construir el centro mediante programas de voluntariado internacional. 


Hace unos días, a través del KuKu-Projekt -el nuevo blog de Andrea y Juanjo-, tuve noticia del fallecimiento de Jorge y experimenté una intensa conmoción, porque guardaba un recuerdo emocionado de él, que me parecía un tipo excelente, vital y creativo, un auténtico productor de arte social.

El taller colectivo y centro cultural "El Hacedor", en La Aldea del Portillo de Busto es la sede de Imágenes y Palabras, la asociación cultural que Jorge  y Dorien crearon para desarrollar su proyecto, al que habían puesto el mismo nombre de un libro de Borges y en homenaje a este autor argentino.

En el centro, junto a amplios talleres para la producción artística, hay una galería de arte, una pequeña biblioteca y una casa. En los talleres, artistas de todas las especialidades y procedencias pueden producir obras e intercambiar experiencias. La galería es un lugar abierto para exposiciones de cualquier disciplina artística y para presentaciones de películas, obras de teatro, recitales de poesía, conciertos de música, danza, para ofrecer charlas, presentar libros y cualquier otra actividad  coincidente con la línea del colectivo Imágenes y Palabras.

Dorien es holandesa y Jorge era argentino, ella  geógrafa, él artista; y contra corriente, ambos apostaron por el medio rural, echando raíces en esa dura tierra gurgalesa de la Bureva. Le he enviado un abrazo solidario a Dorien, a quien deseo lo mejor junto a su hijo Edo. Tengo la seguridad de que seguirá aportando su desbordante vitalidad para sacar adelante esa hermosa locura que es El Hacedor.