viernes, 22 de abril de 2011

BURKAS, CAPUCHONES, PROCESIONES Y OTRAS CONFUSIONES

Burkas y capuchones
1. Y digo yo:

Que oigo por la radio que están llorando los cofrades en Sevilla, por culpa de la lluvia, como en toda España, por las procesiones suspendidas y por las pérdidas que de tal desgracia se deducen. No me importan las procesiones, allá los cofrades y sus señoras, esas Manolas macizas que se exhiben con peineta, pero sí me importa que esos espectáculos turístico-religiosos sigan corriendo a cargo del presupuesto público…y confundiendo a la gente. ¡Sigue siendo una vergüenza!, que nos indica  el nivel de calidad de la pseudodemocracia que padecemos.
Ya sé que mucha gente piensa que no hay que mezclarlo todo, que nada tienen que ver los capuchones católicos y machistas con los burkas, que proclaman la condición vejatoria y sumisa de la mujer  en la religión islámica. Aparentemente no, pero en la sustancia sí tienen que ver: el mismo fanatismo religioso, la idea totalitaria de un dios creador de lo que existe, ideada por las tribus humanas para explicar lo que desconocen -ellas mismas incluidas- y, de paso, para imponer a los demás esta misma ignorancia-creencia. La misma fantasmada convertida en procesión. Sí tienen que ver, sí.


2. Anuncio comercial:

En muy pocos países del planeta realmente se comprendería el auténtico significado de la oferta: ¡El capuchón del nazareno! -en malla o combinado-, el que menos pesa -solamente pesa 70 gramos-. El más cómodo y el más fresco. Recógelo sin esperas -supongo que no habrá tumultos para ir a retirarlos- además, lo que me terminó de convencer fue su eslogan: ¡Compra un capuchón combinado, no llevarás otro igual! Lo de la cinta anti-sudor es la bomba, cuenta con entrada y salida de aire…






3. Noticia de EFE publicada por el  diario “PÚBLICO”:



En Francia se propone la prohibición total de usar el burka en público. "Cubrirse el rostro de esa manera, significa la negación de la identidad, de la personalidad", señala el diputado francés André Gerin. La comisión parlamentaria que estudia las posibles medidas para regular en Francia el uso del "velo integral" que cubre a la mujer, como el burka o el niqab, propondrá la"prohibición absoluta" del mismo en lugares públicos, adelantó hoy el presidente de dicha comisión, el diputado André Gerin. Aunque el informe que prepara la comisión sobre este asunto no se hará público hasta el próximo día 26, Gerin avanza hoy, en una entrevista al diario Le Figaro, que contendrá una "propuesta de resolución" que prohibirá el uso del burka en los espacios públicos de todo el territorio de la República.



Bernard Levy y el presidente Sarcozy
4. Bernard  Levy, en El País:

Se oye decir: "¡Cuidado con mezclar las cosas! Cuidado, al focalizar la atención sobre el burka, con no alimentar una islamofobia que no espera otra cosa para desatarse y sería, a su vez, una forma disfrazada de racismo. Impedimos que ese racismo se infiltrara por la puerta grande del debate sobre la identidad nacional; ¿vamos a dejarlo volver por la ventana de la discusión sobre el burka?". Sofisma, una vez más. Pertinaz y absurdo sofisma. Pues una cosa no tiene nada que ver con la otra. La islamofobia, y esto tampoco se repetirá bastante, no es, evidentemente, un racismo. Personalmente, no soy islamófobo. Me importa lo bastante lo espiritual y el diálogo entre espiritualidades como para ser hostil a una religión u otra. Pero, en cambio, el poder criticarlas libremente, el derecho a burlarse de sus dogmas o creencias, el derecho a la incredulidad, a la blasfemia, a la apostasía, son derechos conquistados a un precio demasiado alto como para que dejemos que una secta, unos terroristas del pensamiento, los anulen o los debiliten. De lo que se trata aquí es de Voltaire, no del burka. Es de las luces de ayer y de hoy, y de su herencia, no menos sagrada que la de los tres monoteísmos. Un paso atrás, uno solo, en este frente, constituiría una señal para todos los oscurantismos, para todos los fanatismos, para todas las verdaderas ideologías del odio y la violencia.

Mafioso detenido, tan contento

5. Los capuchones vuelven a Corleone tras ser detenido el jefe de la Mafia siciliana:


La policía italiana ha vuelto a permitir el uso de los capuchones durante las procesiones de Semana Santa en el pueblo siciliano de Corleone, tras la detención del máximo responsable de la Mafia, Bernardo Provenzano. La prohibición fue decretada hace cuarenta años, cuando los jefes de la Mafia eran miembros del llamado clan de los corleoneses, entre ellos Toto Riina, condenado a cadena perpetua y en prisión desde 1993, y el susodicho Provenzano, detenido en abril del año pasado.  La medida contra los capuchones fue tomada porque a las autoridades les parecía «demasiado peligroso que los asesinos se vistieran de cofrades y atacasen a sus rivales». Después del arresto de Provenzano, el Ayuntamiento de Corleone, las cofradías y la Iglesia católica pidieron el levantamiento de la prohibición, concedido ahora por la policía de Palermo. El alcalde de Corleone, Nicolò Nicolosi, ha expresado su satisfacción por la vuelta de los capuchones al pueblo, pues considera que ello es reflejo de normalidad. Con motivo del primer aniversario de la captura del jefe mafioso, el alcalde ha dado la residencia honoraria a los magistrados y policías que «liberaron al pueblo» de Corleone.





6. El Observatorio de la Laicidad denuncia:                                                  

El Observatorio de la Laicidad ha denunciado la presencia de autoridades, del Ejército y de la Policía, así como el uso del himno nacional en las procesiones religiosas que han tenido lugar en diferentes lugares de España con motivo de la Semana Santa, puesto que, a su juicio, supone "una vulneración del principio de neutralidad del Estado", al poner evidencia una "confusión entre el Estado y una creencia particular, en detrimento de otras convicciones".  En 2008, el Partido Socialista se comprometió a no tocar los acuerdos con la Iglesia pero sí que adquirió el compromiso de promocionar "activamente" la separación entre la Iglesia y el Estado. Para ello decidió promocionar un Observatorio de la Laicidad, la Libertad de Conciencia y las Creencias. Un observatorio que serviría para "evaluar las políticas públicas y las normas jurídicas"

Santa Precaria a lomos de l@s cofrades afect@dos por la crisis

7. Procesión  de Santa Precaria en Bilbao:


Hoy varias personas han realizado la procesión de las personas afectadas por el desempleo, la crisis y las dificultades para llegar a fin de mes. Esta peregrinación ha recorrido la gran vía bilbaína desde su salida a las puertas del Palacio Foral de la Diputación de Bizkaia hasta la Plaza Circular. En este particular paso de Semana Santa, en el que han participado una docena de personas que han desfilado ataviadas de cofrades y penitentes,se ha procedido a llevar a hombros “el paso de Santa Paciencia”, patrona de todas aquellas personas y familias afectadas por la actual crisis económica; y por los recortes presupuestarios, y legislativos, en materia de protección social.




Portada del blog de Juan F. Ferré


8. Michel  Onfray contra la Semana Santa. Dice Juan Francisco Ferré:


En esta época de paganismo sensorial y mediático, más propicia al desenfreno sensual y las pasiones carnales de toda especie que al flagelo de la abstinencia, el instinto de muerte, la pulsión tanática y la estética más siniestra, concebida por una cultura prisionera de una devaluación implacable de la vida, se apropian de las calles españolas con obscenidad, pisoteando los derechos y los deseos de todos los que no comparten su opresivo código de valores morales y estéticos. Las imágenes más divulgadas de la vida se reducen en este tiempo a fúnebres desfiles inquisitoriales donde matriarcas omnímodas exhiben, bajo la apariencia del dolor y el sufrimiento, la victoria sobre la carne y el placer que supone la traumática muerte del hijo. La aberrante representación tiene como destinatario privilegiado, para más inri, a una deidad patriarcal hace tiempo dada por muerta. El cuadro no puede ser más pintoresco siéndolo menos. La muerte celebrando el triunfo de la muerte hasta el fin de los tiempos. [Y no, no me vale para nada el cuento de que ya nadie cree en la representación, que todo se reduce a un puro espectáculo de masas con finalidad cultural y turística, sin trascendencia. Que nadie me venga con esas argucias de final de temporada, mediante las que se perpetúa lo mismo de siempre y sólo eso. No, no son aceptables en este caso ni el cinismo ni el desparpajopostmodernos. Las imágenes son lo que son y valen por lo que valen, combatirlas tiene sentido aún. Otros querríamos a lo mejor otras imágenes tomando las calles, esas mismas que los que las toman ahora para sus fines no estarían dispuestos a tolerar. No lo han hecho nunca.]



En estas luctuosas circunstancias, no conozco mejor antídoto contra este espectáculo deprimente y ofensivo que la inveterada lectura de Nietzsche y, por supuesto, la renovada de Michel Onfray. Ofrezco ahora tres aproximaciones a la obra de Onfray como alternativa liberadora y exuberante al delirio ideológico del vía crucis: Una mística de izquierdasEl saber no es triste y El placer de existir.

3 comentarios:

Astrid Mel dijo...

Hola!!
Permiteme presentarme soy Melannie, administradora de un directorio de blogs, visité tu sitio y está genial, me encantaría poner un link de tu blog en mi sitio web y por mi parte te pediría un enlace hacia mi web y asi beneficiar ambas webs con más visitas.
Si estas de acuerdo no dudes en escribirme a melannieagurto@gmail.com

Éxitos con tu blog.
Un Saludo
Melannie.

Anónimo dijo...

Es curiosa la facilidad de escritura un tanto imaginativa que tiene usted y que en ocasiones roza lo insultante. También es curioso que aquello que goza de, al menos, educación no es obra de tu mente, sino mero estracto lleno de intencionalidad extrema con la única intención de plasmar únicamente argumentos negativos exagerados e infundados uno tras otro para crear en la mente del lector un biente mental negativo mientras lee su blog con el único fin de impregnar en él una idea sobre lo maligno y pernicioso de los actos de Semana Santa para la sociedad española.

Sin considerar por mi parte si deberían continuar saliendo a las calles estas manifestaciones populares, culturales y de fe quisiera ofrecer mi opinión, pequeña, individual y respetuosa para todos.

En cuanto a igualar los capuchones, capirotes u otras denominaciones al burka islámico comunicar que no hace sino que provocar un gran desprestigio pala los islámicos ya que en su religión es una prenda obligada y humillante en cuanto a sometimiento de la mujer al hombre y los capuchones de la Semana Santa son todo lo contrario. Para nada machista como usted dice y menos vejatorio para la mujer. Sólo basta con acercarse a uno de estos actos en los momentos previos o postetiores para comprobar que esta prenda hace a hombres y mujeres iguales. Además es una prenda voluntaria ya que la Iglesia no obliga a sus fieles a usarlo y mucho menos se obliga a todos los españoles. O lo que peor sería, tampoco obliga sólo a uno de los sexos como hace aquella otra prenda con la que usted pretende comparar.

Sigue...

Anónimo dijo...

... Continuación.

Usted pretende alejar estos actos del ámbito cultural. No sé si es correcto o no, pero lo cierto es que es cultura en su plenitud. Es de los pocos actos que existen en este país que nacen del propio pueblo y son mantenidos por el pueblo y no impuestos por los estamentos religiosos o por el Estado. Sí, es el pueblo llano quien lo creó, quien a lo largo de la hiatoria lo ha mantenido vivo y hoy en día hace que sigan manteniendo su plenitud. Es cultura, es tradición, es arte y antetodo es una manifestación ordenada, educada que no molesta, ni lo pretende hacer, a nadie. No es bandálica como otras manifestaciones en la calle que muchas veces deja entrever origenes no del pueblo propiamente. Los cofrades se visten, salen a la calle, andan con tranquilidad y vuelven a recogerse. ¿Qué mal hacen? Algunas procesiones rezan o cantan en voz alta. ¿Eso molesta? Almenos ni gritan ni insultan a nadie. Otras ponen música en sus actos. Bandas, agrupaciones o música de capilla. ¿Es esto lo que molesta? ¿La cultura musical molesta? Si es por los decibelios que salen de las cornetas, trompetas, tambores u otros instrumentos musicales también se debería revisar todos esos conciertos y verbenas de las fiestas locales de nuestro país.

Otro argumento suyo es el que se pagan con dinero público estos actos. Siento decirle que está muy equivocado. El 99,9% del coste de la.Semana Santa es sufragado por los interesados. Sólamente algunos actos en grandes ciudades reciben alguna ayuda de las arcas públicas cuando así dichas arcas consideran, y son muy pocas las veces, que ese acto atrae a turistas y mueven a la población a salir a la calle llenando los comercios de donde ellos recogen impuestos. Imponen por esa ayuda condiciones para que surta ese movimiento social turístico. Hay que reconocer que la Semana Santa es mucho más que eso. No son simplemente procesiones. Si no que le pregunten a hoteleros, hosteleros, comerciantes de todos los ámbitos. Todos los gremios se sirven de la Semana Santa. Todos parecen sacar beneficio de estos actos menos los que en verdad procesionan.

Podría seguir buacando razones por las que no se debiera permitir la Semana Santa y sus actos, así como seguir respondiendo a sus argumentaciones como la de relacionar nuestra Semana Santa con la mafia italiana. Pero sólo encuentro que esas razones que aportas son tan inestables que se caen por su propio peso y no puedo más que decir que por ahora la.Semana Santa es buena para nuestro país. O almenos no es mala ni molesta.

Le invito, y también a quienes lleguen a leer esto, a acercarse a algún acto y si ya se decide a participar activamente y abiertamente reflexione sobre ello.

Por cierto, antetodo muchas gracias por aportar su opinión. Me ha servido para reflexionar sobre el asunto.

Un saludo a todos los seguidores de este blog.

Jesús González
tioranger@hotmail.com